Hoy en día se concibe el liderazgo educativo como la capacidad de encarar los diferentes desafíos que se les presenten a los profesionales de la enseñanza en Educación Infantil, Primaria y Secundaria, siendo necesario que, más allá de ejercer un rol autoritario, tengan ciertas habilidades que les permitan actuar como guías de sus alumnos.
Si bien existen diferentes modelos de liderazgo educativo, cada docente debe hallar un estilo de enseñanza propio que se adapte a las necesidades actuales que existan en el entorno educativo donde eduque, siendo necesario que tenga algunas habilidades y destrezas que faciliten el proceso de enseñanza aprendizaje de sus alumnos.
El liderazgo se ha convertido en cualidad central para la gestión de las organizaciones. Las instituciones educativas, abocadas al cumplimiento de indicadores de calidad, han encontrado en el liderazgo un factor determinante para el cumplimiento de sus metas y el desarrollo de sus propósitos de manera eficiente.